jueves, mayo 12, 2005

PUBLICIDAD / ES


Dedicándome a la publicidad, me suelo quedar arrebatado por un fenómeno al que no suele prestarse mucha atención. Al menos no tanta, y con razón, como a la emisión o publicación de publicidad engañosa, denigrante o ilícita en cualquiera de sus formas. Me estoy refiriendo al hecho, más y más evidente, de la abrumadora segmentación con que la publicidad está logrando caracterizar y definir a la población y al individuo. Y disgregándonos, por tanto.

Me explicaré: Cuando aquí en España nadie o muy pocos tenían coche, allá por los primeros sesenta, aparece esa maravilla llamada “Seiscientos”. ¿Su público potencial?: Todo españolito con poder adquisitivo suficiente. Hoy, cuando cada quisqui tiene su vehículo –y algunos varios- los diferentes modelos tienen que afinar mucho más en el tipo de consumidor al que se dirigen, pudiéndose llegar a definiciones como la siguiente (literal): “individuos, preferentemente de sexo femenino, de clase media-media o media-alta, residente en hábitat urbano, con nivel de formación medio o alto, perteneciente a un núcleo familiar con 2, 1 o ningún hijo, con profesión liberal o asalariada con nivel de ingresos medio/alto, etc....” Existe un coche en el mercado, con nombre y apellidos, cuyo consumidor objetivo es ese. Me lo callo, pero lo conozco.

Y yo me pregunto: de ser esta, como parece inevitable, la imparable tendencia, ¿no asistiremos dentro de poco a una definición del individuo basada ya no sólo en esas variables (clase social, hábitat, etc.), sino en otras que todavía consigan describirnos mejor? Nos encontraríamos entonces con clasificaciones basadas en la ocupación concreta de cada uno, así se sea peluquera, alcalde o ascensorista, o también referidas a aspectos absolutamente personales e incluso privados: si se le ponen los cuernos a la señora esposa, o si te gusta el bacalao al pil-pil, sin ir más lejos.

Los resultados de estos avances podrían ser espectaculares, y como resultado de esos públicos-objetivo quizás resultaran productos como:

-“Eau de Chacha-rel”, el perfume de la empleada del hogar, o
-“Eau de SuDior”, para aquellos con problemas de transpiración. O también:
-“Eau de Ronchas”, para el alérgico.
-Muy vendida sería “Eau de Toilette Farala-es”, la fragancia de la tonadillera.
Evidentemente, al pasar por nuestro lado y olerlos, sabremos al instante en qué trabajan o qué afecciones padecen aquellos con quienes nos crucemos. Los eslóganes serán del tipo: “Dice mucho de ti”.

En otras categorías podrán aparecer cosas como:

-Audi A4 Serie Director Comercial, sólo a la venta para quienes demuestren documentalmente desempeñar dicho cargo (este individuo cogerá al coche hasta para ir a por el periódico, por lo claro que dejará su status). O si no:
-Braun Minipimer Modelo “90 – 60 – 90” : “Para ti, que sabes lo que es ponerse a dieta”.
En fin. Ríanse si quieren, pero les aseguro que no me he vuelto loco. Y si no al tiempo. Con nuestros productos hechos casi a la medida, no podremos dejar de sentirnos los reyes del mambo: tan diferentes, tan personales, tan únicos e intransferibles… Pero al mismo tiempo tan solos.

9 comentarios:

Anonymous Anónimo said...

A mi que cada vez afinen más a la hora de producir necesidades (eso es lo peor) me preocupa solo relativamente, algún margen de maniobra me quedará para transgredir los límites que esperan que respete. Me preocupa más la tendecia en todos los ambitos (incluida por supuesto la publicidad) a premiar la soledad.

12:41 p. m.  
Blogger Jesús said...

eso es de lo que hablo. De producir necesidades no he dicho ni "mu".

12:44 p. m.  
Blogger La Marifé said...

“Eau de Toilette Farala-es”... esa es la mia! jajjajja
te puedo hacer una pregunta jesus?

1:44 p. m.  
Blogger Jesús said...

venga, bjota, dispara

1:46 p. m.  
Blogger diario said...

En fins, de guasa total, tu ya sabes que me considero un 'adbusters' total, curiosamente ayer curioseaba por varios grupos rompepublicidades que hay por la red, es más estoy preparando un post, pa llevarte la contraria.
Oye, nene, ¿pq no te vienes el finde pa Madrid? vamos a subir a ver a Raquel el sabado que hay una countryparty
;)

1:54 p. m.  
Blogger Jesús said...

mmm, no sé si va a ser posible, pero ya te diré.

2:13 p. m.  
Blogger La Marifé said...

es el tema de siempre. si la publicidad está hecha pensando en los consumidores... para quien estan pensados los anuncios de compresas????????? porque yo creo que ninguna se puede sentir tentada de comprar el producto por la publicidad que hacen, sino por necesidad.

2:38 p. m.  
Blogger Jesús said...

claro, bjota. Por la necesidad compras el producto, pero, ¿y la marca? La publicidad tiene sentido cuando existe competencia: si sólo existiera una marca, que tuviera el monopolio de las compresas en el mercado, te aseguro que no haría mucha publicidad. Sobre si se hace pensando en los consumidores, sería muy largo responder... Si te interesa el tema, ponme un e-mail desde mi página.

2:50 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

En fin, de acuerdo con ojos claros, le dan la vuelta, así la soledad con cochazo produce envidia..es demoledor que preducir envidia haga feliz.
Las clasificaciones por profesión, edad y eso cada vez hacen más guettos.
te recomiendo el non olet de ferlosio, es tan listo e iconoclasta que deja todo patas arriba, y hasta me reí mucho.
besos.
siloam

5:02 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home